viernes, 18 de julio de 2014

Capítulo 29.

*Estuvimos dando un paseo, y decidimos ir al parque, y me pareció ver a Sergio con otra chica...*
-Yo: Aitana, ¿ese es Sergio?
-Aitana: Sí...
-Yo: ¿Y esa es Laura?
-Aitana: Sí...
-Yo: Me había dicho que iba a casa de su abuela, no que iba a quedar con esa payasa.
-Aitana: A lo mejor iba a casa de su abuela y por el camino se la ha encontrado y ha estado hablando con ella, seguramente se vaya ya... -intenta calmarme-
-Yo: Ya claro... -digo mirando a Sergio y a Laura-
-Aitana: Que sí, ya ver... -de repente se queda callada y mirándolos boquiabierta-
-Yo: ¿Qué pasa?
*Les miro y los veo besándose... En ese momento se me escapó alguna que otra lágrima y Aitana me abrazó*
-Aitana: María tranquila...
-Yo: No, tranquila no, se está besando con esa...
*Me acerqué hasta donde estaban ellos y cuando me vieron se separaron*
-Sergio: Pu-puedo explicarlo...
-Yo: ¿Y esto es todo lo que me quieres? Encima me has mentido diciendo que ibas a ver a tu abuela... Aquí acabó todo, adiós.
*Me fui corriendo y Sergio vino detrás y me cogió del brazo*
-Sergio: María espera.
-Yo: No, no me espero, déjame en paz.
*Me solté y me fui, no sabía a dónde, sólo quería estar sola, estaba destrozada... Estuve llorando una media hora y preguntándome por qué Sergio había hecho esto...
Entonces llegó Aitana...*
-Aitana: Cielo, no estés mal por una persona que no te merece.
-Yo: Decirlo es muy fácil, pero él me mintió sobre a dónde iba y verle ahí besándose con otra pues...
*Seguí llorando*
-Aitana: Se arrepentirá, te lo digo yo.
*Estuvo consolándome un buen rato, hasta que al fin me sequé las lágrimas y nos fuimos a casa. Yo me tumbé en la cama, miré el móvil y tenía 3 llamadas perdidas de Sergio, pero no le iba a llamar*
-Yo: Tengo 3 llamadas perdidas de Sergio.
-Aitana: No le llames, creo que será lo mejor.
-Yo: No tenía pensado hacerlo -me reí-
-Aitana: Así tienes que estar, sonriendo, que estás más guapa.
-Yo: No se te puede querer más, gracias por todo, en serio, eres la mejor.
*Nos abrazamos*
-Aitana: No las des, para eso están las mejores amigas.

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